lunes, 24 de noviembre de 2008

la ley de Murphy

La experiencia me ha demostrado que hay un par de cosas en las que la ley de Murphy no falla. Nunca. Jamás. Antes se cae el cielo sobre nuestras cabezas.
Una de ellas es encender un cigarrillo y que venga el autobús (o que la cola que estás esperando avance milagrosamente, si el lugar al que vas a acceder está vetado a los fumadores, claro, no vale hacerlo para que te dejen entrar a un bar a las cuatro de la mañana), lo cual resulta hasta útil en muchos casos, así que no me quejaré de esto.
La otra es referente al lanzamiento de packs de DVDs. No falla, en cuanto obtengo alguna tri(o tetra, o penta, o lo que sea)logía por separado, sale a la venta el pack completo (generalmente más barato y con extras adicionales, para más recochineo). El último ejemplo es la trilogía de Star Wars (la nueva, claro). Es que no falla. Mira que ha pasado tiempo desde el estreno de la última (en 2005, para ser más exactos), y mira que pasé años y años (bueno, no tantos, pero lo que se exagera es lo que vale) esperando a que saliera el pack completo, negandome a comprar las películas una por una (porque tampoco eran para tanto, excepto la última, la verdad), hasta que me resigné y pensé que lo de los packs había pasado a la historia. Así que hará un mes, más o menos, compré las tres películas por separado, y ¿qué descubro hoy?


Pues eso, que una imagen vale más que mil palabras...
Ahora el dilema es, ¿qué hago? ¿lo compro? ¿me quedo con las que ya tengo? Creo que la respuesta está clara... Pero el mes que viene, que aun no he cobrado :)

sábado, 22 de noviembre de 2008

Mis series...


Ya que dije que eran casi 20, aquí están las series que de un modo u otro sigo, sin ningún orden en particular:

How I met your mother
Lost
Heroes
Dexter
Galactica
House
El internado
Fisica o química
Fringe
Prison Break
Kyle XY
Shark
Californication
Swingtown
The mentalist
The big bang theory
Life

Al final salen sólo 17... :(

Ojo, estoy teniendo en cuenta únicamente series actualmente en emisión que siga con regularidad (para casi todas ellas he visto todos los capítulos disponibles hasta el momento).

Por tanto están excluidas las series ya terminadas (eso sería otra historia, aunque no tan larga...), cualquier serie de animación (tampoco considero que siga con asiduidad ninguna) y series que veo esporádicamente.

martes, 18 de noviembre de 2008

sobre la manera de seguir las series


El otro día contabilizando así un poquillo por encima resultó que ahora mismo debo estar siguiendo casi dos decenas de series (casi veinte, por decirlo de otra manera menos pedante, o mejor dicho, más directa, que veinte suena a demasiado, y lo de dos decenas... bueno, hay que pensarselo un poco más :)) )

Mucha gente piensa que para ello debo estar todo el día pegada a la televisión, y nada más lejos de la realidad. ¿Por qué? Bueno...

Para empezar, la mayoría de las series que sigo son americanas, y como allí tienen un poco más de criterio que aquí, y las temporadas duran realmente una temporada (en España te puedes encontrar dos o tres temporadas de una misma serie en el plazo de unos cuantos meses tranquilamente), no estoy todo el año viendo una serie. Además, como mucho suele haber 22 capítulos por temporada, que no es tanto.

Luego está la forma de seguir la serie. Tengo tres modelos de seguimiento, a los que se van acoplando una serie u otra en función del interés que susciten.

Están las series que sigo en plan fan absoluto, friki desesperado, bajándome la serie al día siguiente de su emisión en USA, viendola sin subtítulos si hace falta (aunque no suele hacer falta, nunca me cansaré de asombrarme y agradecer a la de gente que hay por internet haciendo subtítulos, por amor al arte, ya que, si son capaces de hacerlos, ellos no los necesitan para nada, evidentemente, pero ahí están, sacando los subtítulos para que el resto de los mortales nos enteremos bien de lo que pasa), buscando spoilers por todos lados (bueno, eso no tanto, que me estoy quitando) y marcando en mi calendario los días en que regresa tras un parón... De esta categoría cada vez se van descolgando más y más series, bien porque ya no tengo tiempo para tanto, bien porque van perdiendo (más bien esto último, la verdad). Se han descolgado de esta categoría Heroes, Prison Break, Kyle XY (y esta jamás volverá, lo juro, de hecho, dudo mucho que vuelva a verla), sigue aguantando Lost, y han subido El internado (sí, lo reconozco sin ningún tipo de rubor) y How I met your mother (el descubrimiento de la temporada).

La segunda categoría se corresponde con las series que, si bien no sigo tan desesperadamente, veo en orden, sin saltarme capítulos, y con cierta asiduidad. O series que sé que terminaré de ver algún día. Aquí están la inmensa mayoría, para qué engañarnos. Por ejemplo: Galáctica, las antes mencionandas Heroes y Prison, House, Californication (otro reciente descubrimiento, pero que de momento no ha sido capaz de subir a lo más alto), Fringe, The Mentalist...

Y por último, las series que ni me van ni me vienen, si pillo un capítulo, bien, pero no voy a hacer grandes esfuerzos por seguir toda la trama o ver una temporada completa. Véase CSI, Mentes Criminales, Física o química (sí, también veo esto, pero si algún día me lo pierdo no voy a organizar un drama...) o Mujeres desesperadas (por influencia de mi hermana).

Una mención aparte merece Dexter, a la que no he encuadrado en ninguna categoría. Si bien es cierto que en ningún momento he seguido la serie 'al día', tampoco me parece justo relegarla a la segunda categoría, porque demuestro más interés por ella que por otras... Dexter es única, sin más, por eso merece un tratamiento aparte

jueves, 13 de noviembre de 2008

ajedrez


Aprovecho esta viñeta que le he mangao a mi amiga la baldosa (sorry, es que me hizo mucha gracia en su día, y quería compartirla por ahí) para una más de mis reflexiones absurdas... (lo sé, lo sé, pero es que paso mucho tiempo en el coche, la radio me aburre, y me da por pensar...).

La vida es como el ajedrez, pero en chungo.
Y no sólo por lo que dijo alguien de que en el amor se gana o se pierde, pero al menos en el ajedrez nos quedan las tablas. No, lo más difícil es llegar a descubrir el objetivo de los demás.
En ajedrez, sabes que tu contrincante tiene como objetivo tu rey, y tú el suyo, y por tanto es más fácil intentar pensar jugadas y posibles respuestas (fácil, fácil no es que sea, pero al menos hay una lógica a la que aferrarse, a nadie se le va a ocurrir que el objetivo de algún loco al jugar al ajedrez sea tener 10 caballos en el tablero, y claro, a la que le comas un peón, lo has destrozado para los restos), pero en la vida real... ¿Tú cómo sabes qué es lo que pretende el otro? En algunos casos es fácil, pero en otros... telita (y no sólo porque la gente sea críptica, que también, sino porque muchas veces los distintos puntos de vista que podemos tener acerca de un mismo tema nos hace incapaces de plantearnos siquiera que alguien pueda pensar de otra manera).
Claro que para esos momentos de rayada extrema siempre nos quedará la opción de jugar al toque, sin pensarselo demasiado, si total... para lo que va a servir...